El portal La Encerrona, denunció hoy que la Presidenta Dina Boluarte tiene una colección de relojes, cuyos precios no están al alcance de un peruano de a pie. Sobre todo, uno en especial que es de marca ROLEX que tendría un valor de hasta 14 mil dólares.
Se trata de un accesorio que, Boluarte nunca lo lució cuando era la vicepresidenta de Pedro Castillo y ministra de estado. Sin embargo, luego de varios de meses de asumir la presidencia, apareció en la muñeca de su brazo izquierdo en conferencias de prensa, reuniones o actividades protocolares, y no sería el único.
Según el medio de comunicación, la presidenta contaría con más de una docena de relojes hasta la fecha y desde que llegó al Gobierno como vicepresidenta y ministra de Desarrollo e Inclusión Social.
Según el periodista Ernesto Cabral, se pudieron advertir hasta la fecha, un total de 14 relojes usados por la mandataria, entre ellos, un Rolex de miles de soles y cuyo costo no se justifica con el salario actualmente percibido por la mandataria.
Precisamente, ahora el Perú entero se pregunta: ¿cómo adquirió dicho reloj, si el sueldo de la presidenta es de 16 mil soles mensuales? y ¿Cuál es el origen de esta lujosa colección?
Al consultar sobre este reloj a la única empresa que distribuye este artículo de lujo en el Perú, se pudo conocer que el precio de un Rolex “de acero con oro rosa” varía entre los USD$ 6 mil y USD$ 14 mil dólares, dependiendo del modelo. Un costo que dista en amplitud con el salario que recibe la mandataria de manera mensual, el cual corresponde a un total de S/15 mil 500 soles, casi 16 mil soles.
La situación llama la atención, pues estos accesorios habrían sido adquiridos después de que Boluarte haya dejado de percibir sueldos de S/30.000 soles, que corresponde al de un ministro, a S/15 mil 500 soles, que es el destinado como honorarios por ser presidente de la República. Es durante este periodo, también, que se registró la adquisición del polémico Rolex.
Ahora, Boluarte deberá responder sobre la prodencia de este artefacto de lujo, debido a ser un funcionario público y más aún, cuando desde Palacios de Gobierno, no se informe sobre la procedencia del Rolex.