Alberto Fujimori, ex presidente de Perú (1990-2000), murió a los 86 años, marcando el final de una figura clave y controvertida en la historia política del país. Fujimori emergió como un “outsider” en 1990, derrotando inesperadamente a Mario Vargas Llosa, un reconocido escritor y político liberal. Su victoria sorprendió debido a su perfil técnico y académico, sin el peso político de los partidos tradicionales.
Durante su mandato, Fujimori implementó reformas económicas drásticas que ayudaron a estabilizar una economía en crisis, y lideró la lucha contra el terrorismo, particularmente contra el grupo maoísta Sendero Luminoso, logrando importantes victorias como la captura de su líder, Abimael Guzmán. Sin embargo, su gobierno derivó en una dictadura.
En 1992, Fujimori dio un autogolpe, disolviendo el Congreso y concentrando el poder en el Ejecutivo, con el respaldo militar y civil. Esto consolidó su control sobre las instituciones y generó serias violaciones a los derechos humanos, incluidas ejecuciones extrajudiciales y esterilizaciones forzadas en comunidades indígenas.
A lo largo de su gobierno, Fujimori también enfrentó acusaciones de corrupción, particularmente vinculadas a su asesor, Vladimiro Montesinos. En el año 2000, tras una reelección muy cuestionada y en medio de un escándalo de corrupción, Fujimori huyó a Japón y renunció vía fax.
Años después, en 2005, fue extraditado a Perú desde Chile y en 2007 fue condenado por violaciones a los derechos humanos y corrupción. En prisión, su salud se deterioró, pero su figura siguió polarizando al país.
Principales denuncias y sentencias:
- Violaciones a los derechos humanos: En 2009, Fujimori fue condenado a 25 años de prisión por violaciones a los derechos humanos, específicamente por su responsabilidad en dos masacres:
- Masacre de Barrios Altos (1991): Un grupo militar encubierto, el “Grupo Colina”, asesinó a 15 personas, incluyendo un niño, bajo el pretexto de luchar contra Sendero Luminoso.
- Masacre de La Cantuta (1992): Miembros del Grupo Colina secuestraron y asesinaron a nueve estudiantes y un profesor de la Universidad La Cantuta, acusándolos de ser simpatizantes de Sendero Luminoso.
- Corrupción y desvío de fondos: Fujimori también fue sentenciado por diversos casos de corrupción. En particular, fue condenado por:
- Pago ilegal a Vladimiro Montesinos: Se le imputó el delito de haber desviado ilegalmente fondos del Estado para pagar 15 millones de dólares a su ex asesor Montesinos, quien controlaba una red de espionaje, manipulación de medios de comunicación y sobornos a políticos y empresarios.
- Sobornos a medios de comunicación: Se le encontró culpable de haber orquestado una operación para controlar a los medios de comunicación, sobornando a propietarios y periodistas para que influyeran en la opinión pública a su favor durante su segundo mandato.
- Esterilizaciones forzadas: Aunque no ha sido condenado por este caso específico, Fujimori ha sido señalado como responsable de la política de esterilizaciones forzadas llevadas a cabo entre 1996 y 2000. Bajo el Programa Nacional de Salud Reproductiva, más de 270,000 mujeres, en su mayoría indígenas, fueron esterilizadas sin su consentimiento, como parte de una campaña para reducir la pobreza y mejorar la salud pública. A pesar de que Fujimori ha negado su responsabilidad directa, las denuncias continúan persiguiéndolo.
El impacto de la estatización en la llegada de Fujimori:
El fracaso de las políticas estatistas de García y la devastación económica fueron factores decisivos que propiciaron el triunfo de Fujimori en 1990. Mario Vargas Llosa, quien era el favorito para ganar las elecciones, representaba una alternativa neoliberal, pero su discurso técnico y elitista alienó a sectores populares que se inclinaban por un candidato que no perteneciera a las élites tradicionales.
Fujimori, por otro lado, surgió como un outsider, prometiendo una “economía con rostro humano”, sin comprometerse abiertamente con un modelo de libre mercado ni con las políticas estatistas anteriores. Sin embargo, una vez en el poder, Fujimori cambió radicalmente el rumbo económico de Perú, adoptando políticas neoliberales bajo la tutela de organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial.
Fujimori y las reformas neoliberales:
- Privatización y desregulación: Fujimori revirtió gran parte de la estatización del gobierno anterior, emprendiendo un agresivo programa de privatización de empresas estatales en sectores clave como telecomunicaciones, energía y minería. Estas medidas, aunque controvertidas, lograron atraer inversión extranjera, estabilizar la economía y reducir la inflación.
- Políticas de ajuste estructural: Fujimori implementó un programa de ajuste estructural que incluía la liberalización del comercio, la flexibilización del mercado laboral y la reducción del gasto público. Estas medidas, aunque estabilizaron la macroeconomía, generaron un impacto social significativo, con aumentos en el desempleo y la pobreza a corto plazo.
Legado de la estatización y las reformas:
El colapso económico producto de las políticas estatistas de Alan García allanó el camino para la implementación de un modelo neoliberal bajo Fujimori, que marcó un cambio radical en la estructura económica del país. Aunque las reformas de Fujimori lograron una recuperación económica, la deuda social y las desigualdades generadas por sus políticas de privatización aún generan debate en Perú.
Situación actual:
Alberto Fujimori fue liberado brevemente en 2017 por razones humanitarias debido a problemas de salud, tras un polémico indulto otorgado por el entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski. Sin embargo, el indulto fue revocado en 2018 por la Corte Suprema de Perú, y Fujimori regresó a prisión. Durante sus años en la cárcel, ha sufrido de diversas complicaciones de salud, pero su legado sigue siendo altamente polarizador. Para algunos, sigue siendo un héroe por su lucha contra el terrorismo y la recuperación económica; para otros, un dictador corrupto y violador de los derechos humanos.
Estudios de Alberto Fujimori:
Alberto Fujimori nació el 28 de julio de 1938 en Lima, Perú, hijo de inmigrantes japoneses. Su formación académica fue sólida, destacando en ciencias y matemáticas. A lo largo de su vida, Fujimori acumuló una serie de títulos y estudios que lo prepararon para su carrera política:
- Ingeniería Agrónoma: Estudió en la Universidad Nacional Agraria La Molina en Lima, donde obtuvo el título de Ingeniero Agrónomo en 1961. Esta formación le dio un perfil técnico que luego sería clave en su imagen política.
- Postgrados en el extranjero: Continuó su formación en Francia y Estados Unidos. En la Universidad de Estrasburgo (Francia), estudió física, y más tarde obtuvo una maestría en Matemáticas en la Universidad de Wisconsin-Milwaukee (EE. UU.).
- Carrera académica: De vuelta en Perú, Fujimori se dedicó a la docencia universitaria. Fue profesor y luego rector de la Universidad Nacional Agraria La Molina (1984-1989). También tuvo un programa televisivo sobre ciencia y tecnología en un canal estatal, lo que ayudó a aumentar su perfil público.
Cargos ocupados:
Alberto Fujimori es conocido principalmente por haber sido presidente del Perú, pero a lo largo de su carrera, ocupó otros cargos relevantes:
- Presidente de la República (1990-2000): Su mandato presidencial es su cargo más conocido. Ganó las elecciones de 1990 como un outsider sin vínculos con los partidos tradicionales, derrotando a Mario Vargas Llosa. Su presidencia estuvo marcada por importantes reformas económicas, la lucha contra el terrorismo, y la concentración del poder tras el autogolpe de 1992.
- Autogolpe de 1992: Tras disolver el Congreso en abril de 1992, Fujimori reorganizó el poder en sus manos, implementando un nuevo marco constitucional en 1993. Desde entonces, su mandato fue considerado una dictadura hasta su caída en el año 2000.
- Reelección en 1995: Fujimori fue reelegido en 1995, después de haber modificado la Constitución para permitir la reelección inmediata. Su victoria fue aplastante, pero su segundo mandato estuvo plagado de denuncias de corrupción y violaciones a los derechos humanos.
- Caída en el año 2000: En su tercer intento de reelección, tras unas elecciones fraudulentas, Fujimori fue forzado a renunciar en medio de un escándalo de corrupción que implicaba a su asesor Vladimiro Montesinos. Fujimori huyó a Japón y renunció desde el extranjero, marcando el fin de su gobierno.
Familia de Alberto Fujimori:
Alberto Fujimori proviene de una familia de inmigrantes japoneses. A lo largo de su vida personal y política, su familia ha estado en el centro del debate público:
- Padres:
- Natsu Fujimori (madre) y Masao Fujimori (padre) fueron inmigrantes japoneses que llegaron al Perú en la década de 1930, estableciéndose en Lima. Sus raíces japonesas fueron un tema que causó controversia durante su carrera política.
- Esposa:
- Fujimori se casó con Susana Higuchi en 1974. Higuchi fue una figura importante durante los primeros años del gobierno de Fujimori, pero la relación se deterioró. En 1994, Higuchi denunció a Fujimori y a su entorno por corrupción, lo que llevó a un escándalo público. Se divorciaron en 1996, y Higuchi se convirtió en una opositora política.
- Hijos:
- Keiko Fujimori: Es la hija mayor de Alberto Fujimori y una figura clave en la política peruana. Keiko asumió el rol de primera dama tras el divorcio de sus padres y ha sido dos veces candidata presidencial (2011 y 2016). Actualmente es líder del partido político Fuerza Popular y sigue siendo una figura polarizadora.
- Kenji Fujimori: Hijo menor de Fujimori, también se ha dedicado a la política, siendo congresista y desempeñando un papel relevante en las disputas internas del fujimorismo. En 2018, fue expulsado del Congreso por un escándalo de compra de votos.
- Hiro y Sachi Fujimori: Sus otros dos hijos han mantenido un perfil más bajo, alejados de la política, aunque se han involucrado en la defensa de su padre en ciertos momentos.
Legado familiar:
La familia Fujimori, en particular Keiko y Kenji, ha intentado mantener el legado político de su padre, aunque las divisiones internas y las acusaciones de corrupción han debilitado al movimiento fujimorista en los últimos años.